FÁBULA: LA GRANJA

En un pueblo muy lejano había una granja en la cual habitaba una gran variedad de animales. Cada uno de ellos destacaba en un trabajo. El caballo, el cual, era uno de los más fuertes e importantes ya que lo ocupaban para cargar y siempre le ponían un uniforme fuerte y de gran resistencia. Tenía dos amigos el gallo y el pato, que lo admiraban mucho, por lo que el caballo poco a poco fue adquiriendo una personalidad prepotente y desde entonces siempre cargaba su vestidura y nunca quería quitársela para que estuviera listo cada vez que lo llamaran. Día con día el caballo fue optando otra mentalidad: ya casi no se reía, no convivía con sus amigos y mucho menos hablaba con ellos, solo hablaba con el gallo y el pato a los cuales apreciaba mucho. En una ocasión cansados de su actitud, el gallo y el pato fueron hablar -Amigo nos preocupa el que estés obsesionado con tu vestidura y venimos a decirte que si no te la quitas perderás nuestra amistad. Esto le dolió al caballo, pensó mucho en lo que pasaría pues si no se quitaba la vestidura perdería a sus amigos y si eso pasaba no sería su vida igual así que decidió seguir con su amistad. Trató de quitarse su ropa pero no pudo, tiro y tiro de ella pero ésta se le había encarnado, fue a pedirle ayuda a sus dos amigos pero ellos no pudieron, así que pensaron que esto era un truco del caballo para engañarlos y poder continuar con su amistad y al mismo tiempo mantener puesta su vestidura. Sus amigos pensaron que nunca se quitaría su ropa y lo dejaron solo.